¿Todo el mundo tiene una cuenta de Facebook menos tú? ¿La gente te tira piedras por la calle porque ellos hablan de granjas, perfiles, álbumes compartidos y botones Me Gusta, y tu no tienes cuenta? No deberías.

Hacerse una cuenta en Facebook es un proceso bastante más sencillo y rápido de lo que pudiera parecer: lo único que necesitas es una cuenta de correo y ganas de socializarte. ¿Las tienes? Entonces sigue leyendo.

1. Datos básicos

Lo primero de todo es ir a la página principal de Facebook. En el lado derecho verás un formulario con unos pocos datos para rellenar.

Todos ellos son necesarios. Rellénalos y presiona Registrate.

2. Pasa el Captcha

Captcha es el nombre que reciben los indescifrables mezclas de letras y números que debes transcribir.

Sirven para impedir que robots o procesos automáticos puedan ser usados para, por ejemplo, crear cuentas indiscriminadamente. Si no entiendes nada, puedes presionar Prueba con otras palabras. Cuando lo veas más claro, escribe el texto y presiona Regístrate.

3. Busca a tus amigos

¿De qué te sirve utilizar Facebook si no tienes a nadie con quien compartir tus aventuras? No tendría sentido, y por eso lo primero que verás al iniciar sesión en Facebook es este asistente para importar contactos desde tu cuenta de correo.

Deberás elegir tu servicio: Messenger, Windows Live Hotmail u Otros servicios de correo y a continuación escribir tu dirección de correo y/o tu contraseña. Facebook no guardará este dato, tan sólo lo necesita para obtener tu lista de contactos y comprobar si ya se encuentran en Facebook o no.

4. Información sobre ti

En el siguiente paso podrás incluir, si así lo deseas, los datos sobre tu instituto, universidad y/o empresa actual.

El cuadro muestra automáticamente sugerencias mientras escribes. Utiliza dichas sugerencias para seleccionar siempre que sea posible. De este modo podrás encontrar fácilmente a gente de tu mismo instituto o a compañeros de trabajo.

5. Sube tu foto

Salvo que tu nombre sea muy muy especial, es posible que compartas nombre y apellidos con decenas, cientos o miles de personas. ¿Qué pasaría si alguien te está buscando? ¿Cómo pueden saber que eres realmente tú?

La respuesta, además de preguntar, es utilizando una foto de perfil. La puedes cargar desde tu ordenador o hacerla directamente, si dispones de webcam.

6. Confirma tu correo

Hasta que no hayas confirmado que tu correo es efectivamente tuyo, muchas de las funciones de Facebook estarán bloqueadas.

Ve a tu Bandeja de entrada (si no ves nada, échale un ojo a la carpeta de correo no deseado, o spam) y busca un mensaje de Facebook. En él encontrarás un enlace en el que hacer clic.

7. Disfruta

Una vez tu correo esté confirmado, ya eres un ciudadano de la ciudad caralibro. ¡Enhorabuena!

¿Qué puedes hacer ahora? Algunas ideas:

• Buscar y añadir a más amigos
• Rellenar tu perfil con más información
• Subir fotos y vídeos
• Probar aplicaciones y juegos
• Cotillear las fotos y perfiles de tus amigos

En el caso de que te dejes Gmail abierto en un lugar público, el resultado es igual de malo, o peor. Alguien podría no sólo leer tu correo o usarlo haciéndose pasar por ti, sino también usar el Chat, realizar llamadas telefónicas usando tu crédito (si tuvieras, de Google Voice), o incluso acceder a otros servicios de Google de la misma cuenta.

Cierre de sesión remoto

Por tanto, la solución, si no has tenido más remedio que salir por patas dejando tu sesión de Gmail abierta, es cerrarla de forma remota. Hacerlo es muy sencillo y lo consigues con dos clics.

Primero, entra en Gmail y dirígete a la parte inferior de la página, haz clic en Información detallada.

Se abrirá una ventana en la que se muestran las últimas sesiones que se han iniciado en Gmail, incluyendo la dirección IP y el país al que corresponde, la hora, el tipo de acceso y si hay actividad o no (mediante un asterisco).

Esta pantalla no te permite sólo conocer si alguien está «dando un vistazo» a tu cuenta desde algún lugar que no sea tu casa, sino cerrar el resto de sesiones. ¿Cómo? Obviamente, pulsando el único botón disponible: Cerrar todas las demás sesiones.

Tal y como te advertirá la propia página, de nada sirve que cierres el resto de sesiones, si no cambias tu contraseña: en el caso de que alguien la conociera, volvería a iniciar sesión y ya está. Por tanto, si crees que alguien puede estar iniciando sesión en tu cuenta de este modo, es primordial que modifiques la contraseña.

Lo más recurrido será poner en entredicho tu orientación sexual, pero otras bromas pueden ser más pesadas o incluso peligrosas, si aquel que se encuentra tu Facebook abierto tiene muy mala idea.

Desde hace poco, Facebook te da la posibilidad de cerrar sesión remotamente. Es decir, ver un listado de todas las conexiones a Facebook que están abiertas con tu sesión, con la posibilidad de desconectarlsa. ¿Quiéres ver cómo? Sigue leyendo.

Sesiones abiertas

Si bien la principal utilidad de esta función es solventar el problema causado por nuestro despiste al irnos sin cerrar sesión, también es útil para comprobar si alguien está accediendo a tu cuenta fraudulentamente.

Por ejemplo, ¿desconfías de si alguien ha adivinado tu contraseña y te está espiando silenciosamente? En tal caso, lo descubrirás en un momento.

Lo primero de todo es encontrar la opción. No es fácil ya que, como suele ser habitual, está algo escondida. Haz clic en Cuenta > Configuración de la cuenta (arriba a la derecha). Lo siguiente será hacer clic en Seguridad de la cuenta.

Se desplegará un listado con todas las conexiones a Facebook que se han realizado últimamente. No te precipites en tu juicio: que aparezcan unas cuantas es normal, no significa que tus compañeros de trabajo se estén echando unas risas a tu costa chateando con tus contactos.

Debes tener en cuenta lo siguiente: si te conectas a Facebook desde otras aplicaciones (Digsby, teléfono móvil, etc.) es posible que la conexión a Facebook se haga desde otro país, donde estén los servidores (es el caso de Rotterdam, en la captura de pantalla anterior).

La ubicación no será siempre exacta, pues se basa en la geolocalización IP. Si tienes dudas, dejando el cursor sobre la ciudad te dirá la dirección IP. Una búsqueda en Ripe.net te dará la pista de si es un particular o no. En el caso anterior, se trata de la conexión de Nimbuzz.

Cerrando la sesión

Supongamos que has encontrado algo sospechoso, o que quieres cerrar la sesión que dejaste abierta en el trabajo ¿Qué hacer? Lo primero es encontrar cuál es. A partir de la hora y dirección IP, no será difícil. Después, sólo tienes que pulsar Concluir Actividad, para que dicha sesión se cierre: No se te pedirá ningún tipo de confirmación.

Se echa en falta una opción para impedir permanentemente el acceso a determinadas direcciones así que, mientras tanto, acuérdate de cambiar tu contraseña, si has tenido algún problema de accesos no deseados.

Es muy recomendable tener contraseña en la cuenta de usuario de Windows, pero es una lata tener que escribirla cada vez. Me explico: la mayoría de las veces, el peligro no está en casa, sino en Internet.

Establecer una contraseña en la cuenta de administrador protege tu equipo mejor ante ataques desde la red. Además, es más que probable que tengas problemas para usar herramientas como la Consola de Recuperación de Windows si tu cuenta no tiene contraseña.

En resumen, si eres el único que utiliza tu ordenador y estás harto de ver la pantalla de Bienvenida de Windows esperando a que introduzcas tu contraseña, sigue leyendo.

Con software de terceros

Utilizar un software es la forma más sencilla de utilizar el inicio de sesión automático, pues generalmente no tendrás más que hacer unos pocos clics.

Prácticamente todos los programas de tweaking incluyen esta función. Algunos ejemplos que puedes usar son los siguientes:

• Tweak UI – diminuto tweaker de Microsoft. Gratuito, pero sólo XP.
• TweakXP, TweakVi y Tweak7 – los tweakers de Totallidea. De pago, pero la trial es funcional.
• TuneUp Utilities – uno de los programas de tweakers más populares. Trial funcional.
• Windows Automatic Login – programa gratuito que solo sirve para esto. Windows XP y Vista.
• Autologon for Windows – software gratuito de Sysinternals para configurar el autologon
• LogonExpert – Inicio automático sin comprometer tu seguridad: encripta las contraseñas de forma segura

Desde el Registro de Windows

Si modificar el Registro forma parte de tus actividades preferidas con las que llenar el tiempo libre, no lo pienses más: también puedes conseguir el inicio de sesión automático de este modo. En caso contrario, es mejor que uses los programas anteriores.

Así pues, lo primero es abrir el Editor de Registro de Windows (Inicio > Ejecutar > regedit) y visitar la siguiente clave

HKEY_LOCAL_MACHINE\SOFTWARE\Microsoft\WindowsNT\CurrentVersion\Winlogon

Aquí, debes realizar los siguientes cambios:

• AutoAdminLogon – valor «1»
• DefaultDomainName – Tu nombre de dominio o nombre del equipo actual
• DefaultUsername – El nombre de usuario con el que quieres iniciar sesión
• DefaultPassword – La contraseña

Si te falta alguna de las claves, tendrás que crearlas con el menú contextual. Todas las claves son del tipo String (Cadena de texto)

Desde Windows

Lo cierto es que no necesitas ningún programa adicional ni mancharte demasiado las manos con el Registro para arrancar Windows sin escribir tu contraseña: puedes configurar el inicio de sesión automático desde Windows.

Para ello, escribe lo siguiente en el cuadro Ejecutar (Win + R):

control userpasswords2

La pantalla de gestión de cuentas de usuario se abrirá. Desmarca la casilla Los usuarios deben escribir su nombre y contraseña para usar el equipo.

Después de pulsar Aplicar, Windows de pedirá que introduzcas el usuario y contraseña con el que se iniciará sesión automáticamente.