10 cosas que odio de las páginas de hosting de archivos

Ya le dimos un repaso hace un tiempo a las páginas de descarga de software y a los juegos de Facebook ¿A quién le toca ahora?

En esta ocasión, vamos a ver las 10 cosas que más odio de las páginas de hosting de archivos: es decir, MegaUpload, RapidShare y demás.

Existen muchos tipos distintos, pero hay un conjunto de características comunes que las hacen bastante detestables, especialmente si no tienes el menor interés en gastar un céntimo por conseguir una cuenta Premium.

Veamos la lista a continuación:

1. Captchas

Los «captcha» son textos que debes repetir para certificar que eres un ser humano pensante. A mí eso de tener que demostrar mi humanidad nunca me ha parecido cosa buena, especialmente cuando estos captchas son tan retorcidos y enrevesados que es imposible saber qué pone.

Además, la mayoría de estos captchas pueden ser descifrados por algunos programas de descarga como JDownloader y demás, lo cual me hace preguntarme realmente para qué sirven. En ocasiones parece que su función es la de aburrir y frustrar a los seres humanos.

2. Publicidad

Se ve que esto de  vender cuentas premium no es del todo rentable, especialmente si tu página no es una de las más conocidas. Por esto, este tipo de páginas disponen de unos de los banners publicitarios más invasivos y molestos que puedes encontrar en Internet.

3. Ventanas emergentes (pop-ups)

Si hablamos de publicidad, no podemos dejar de lado a las ventanas emergentes o pop-ups. No importa si tu navegador incorpora la última tecnología en el bloqueo de ventanas emergentes: si utilizas estas páginas con frecuencia, antes o después encontrarás que hay unas cuantas ventanas con publicidad abiertas en segundo plano.

4. Tiempo de espera

Si tuviera que elegir la característica más representativa de estas páginas, esa sería el tiempo de espera. Estos contadores pueden ir desde los 10 segundos hasta más de un minuto. Suficiente para que te pongas a hacer otras cosas y, cuando te acuerdes y vuelvas para realizar la descarga, se te diga que el tiempo se ha agotado y tienes que volver a iniciar la descarga.

5. Velocidad desesperante

La verdad es que la mayoría de estas páginas ofrecen una velocidad de descarga gratuita bastante aceptable, rondando los 100kb/s o más, pero siempre hay excepciones, donde las descargas son demasiado lentas y cualquier descarga se convierte en un suplicio.

6. Límite de descargas simultáneas

Es muy común que no se te permita realizar más de una descarga a la vez utilizando una cuenta gratuita. Hasta ahí, todo normal; el problema viene cuando la página está detectando erróneamente que estás descargando algo, o lo está haciendo alguien de tu red, o ya cancelaste la descarga, o ya terminó hace un tiempo…

7. Límite de descarga por día u hora

Otro límite que se suele aplicar es el de máxima descarga en un intervalo de tiempo que va desde una hora hasta un día o semana. Al igual que en el caso anterior, el problema mayor viene cuando tu IP es compartida con otras personas que pudieron descargar archivos, llegando al límite.

Además, te obliga a repartir tus descargas en un intervalo de tiempo, lo cual supone mayor riesgo de que los archivos dejen de estar disponibles antes de que termines.

8. Archivos que ya no existen

Así que, tras un esfuerzo sobrehumano, has logrado bajar 125 partes de un archivo, y cuando te dispones a bajar la última, la 126… ¡sorpresa! Ya no está disponible. Es comprensible que estos servicios borren los archivos que incumplen sus términos, pero esto no quita que, como usuario, sea una cosa de lo más frustrante y odiosa.

9. Te hacen sentir mal

Lo más normal es que se ofrezcan dos tipos de descarga: normal, y premium. Ahora bien, estas páginas han desarrollado un lenguaje propio mediante el cual te sientes mal por elegir la versión gratuita.

Por ejemplo, tal y como se aprecia en el caso anterior, se nos dice que estamos bajando a la velocidad más baja posible (esto suena a bastante patético), mientras que, por otro lado, debemos humillarnos a nosotros mismos pulsando sobre un botón llamado Slow Download (descarga lenta).

10. Las agujas

Para terminar ¿qué mejor modo que con algo intrascendente? Pues sí, la última cosa que más odio son las estupidas agujas que tiemblan como si estuvieran midiendo la intensidad de un terremoto. No sé a quién se le ocurrió que esto era un buen reclamo, pero a mi siempre me ha parecido feo y sin sentido.

Soluciones

Si eres una víctima de este tipo de páginas, hay varias herramientas que te pueden ser de gran utilidad. La más obvia, y cara: hacerte con una cuenta Premium. El mundo será del color de rosa, aunque tu bolsillo esté bastante más vacío. Eso sí, elige bien de qué web quieres la cuenta…

Para acabar con la publicidad, lo mejor es que utilices alguna extensión para tu navegador que la elimine. En el caso de Firefox, AdBlock Plus es la más popular, y no te será difícil encontrar su equivalente para otros navegadores.

Otra gran ayuda son los gestores de descarga especializados en este tipo de páginas: JDownloader, Mipony y Universal Share Downloader son algunos de ellos. Con ellos, la descarga generalmente consiste en añadir el enlace y ya está: el programa hará las esperas necesarias automáticamente y, a veces, incluso escribirá los captcha.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies