¿Cuándo fue la última vez que usaste Java? Salvo contadas excepciones, lo más probable es que haya sido hace mucho, mucho tiempo.
La útilidad de los plugins de Java para el navegador es cada vez menor, pues se puede suplantar por otras tecnologías menos pesadas como HTML5 o incluso Flash.
Además, últimamente se recuerda a Java sólo por las nuevas vulnerabilidades y las continuas actualizaciones (todas ellas intentando colarte una barra para el navegador). En resumen: ¡estás casi mejor sin Java!
Desinstala Java
Desinstalar Java no tiene ningún misterio. Desde el Panel de Control > Programas y características (si estás en Windows XP, Agregar o Quitar programas) busca todas las entradas de Java y pulsa Desinstalar.
Según cuánto tiempo llevas con Windows y cuántas versiones de Java hayas instalado, la lista de cosas que tienes que desinstalar puede crecer. En mi caso, ¡he acumulado cinco versiones distintas!
El proceso es relativamente rápido y, afortunadamente, no te pide cerrar el navegador ni reiniciar Windows.
En el fondo, echarás de menos ver esta ventana cada dos o tres días, y lo sabes.
