Cualquier cliente de correo de este milenio que se precie es capaz de añadir tu cuenta de Gmail de forma casi automática. Es decir, introduciendo únicamente tu usuario y tu contraseña.
No obstante, que funcione no quiere decir que esté configurado de la forma óptima. A veces, por ejemplo, el cliente correo se «pelea» con Gmail en funciones como la protección antispam.
En este artículo encontrarás algunos trucos y consejos para configurar Gmail en tu cliente de correo como un profesional.
1. Lo básico
Los datos básicos para configurar tu cuenta de Gmail en cualquier cliente de correo con soporte para IMAP son los siguientes:
- Servidor entrante: imap.gmail.com
- Requiere SSL: Sí
- Puerto: 997
- Servidor saliente: smtp.gmail.com
- Requiere SSL: Sí
- Puerto: 465 o 587
- Requiere autenticación: Sí (la misma que para el servidor entrante)
- Nombre de usuario: tu dirección de correo completa. Ejemplo [email protected]
- Contraseña: tu contraseña de Google
Thunderbird y casi todos los clientes de correo configurarán el sistema correctamente con sólo introducir el usuario y la contraseña, pero nunca está de más revisar que todo está en orden.
2. El filtro antispam
Salvo que tengas un cliente de correo especialmente inteligente o eficaz en la lucha contra el spam, el propio Google te recomienda que deshabilites la función antispam de tu cliente.
Google ya filtra por su parte tus mensajes y tu cliente puede hacer un doble filtro que vuelva loco al sistema.
En Thunderbird el filtro antispam es muy fácil de desactivar. Ve a Herramientas > Configuración de la cuenta, en la pestaña Correo no deseado.
Desactiva la casilla Activar los controles adaptativos de correo no deseado para esta cuenta y guarda los cambios con Aceptar.
Todavía puedes usar tu cliente de correo para marcar mensajes como spam, moviéndolo a la carpeta / etiqueta [Gmail]/Spam.
Incluso puedes hacer que Thunderbird lo haga automáticamente al pulsar el botón de spam. Para ello, ve a las Opciones de Thunderbird, pestaña Seguridad, y marca Cuando marco mensajes como no deseados, después eligiendo Moverlos a la carpeta «Correo no deseado» de la cuenta.
Esto por supuesto es opcional y depende de tus preferencias. En ocasiones el cliente de correo se puede volver algo loco manejando carpetas y mensajes, así que si ese es tu caso, mejor deja que Google gestione el antispam.
3. Carpetas y etiquetas
Según pasan los años, Gmail va ganando más y más carpetas y etiquetas. Si hace unos años sólo tenía Recibidos, bandeja de salida, borradores y spam, ahora la lista se completa con notificaciones, promociones, foros, prioritarios, importantes… Un lío.
Desde las opciones de Gmail > Etiquetas, puedes elegir qué etiquetas van a estar disponibles en IMAP, es decir, en tu cliente de correo.
Una vez más, depende de cómo uses Gmail. Por ejemplo, si no usas los mensajes prioritarios ni destacados, es una buena idea desmarcar Mostrar en IMAP en ellos. De igual modo, si quieres tener los historiales de chat en tu cliente de correo, marca Mostrar en IMAP en Chats.
En cualquier caso, también puedes elegir qué carpetas o etiquetas vas a descargar en tu cliente de correo, como Thunderbird. Para ello, haz clic derecho en tu cuenta y elige Subscribirse.
4. Papelera
Google te recomienda que al borrar un mensaje desde un cliente de correo IMAP, sólo lo marques como borrado, sin moverlo a la carpeta Papelera. De este modo el mensaje se borra «de verdad», y no aparece en la carpeta «Todos».
En Thunderbird puedes ajustar esto desde las Opciones de la cuenta, en Configuración del servidor.
Personalmente es una opción que no me acaba de convencer demasiado, o quizá no funciona del todo bien en Thunderbird. Mi recomendación: prúebalo y si te pasa como a mi, vuelve a configurarlo como Mover a la carpeta Papelera. Así lo he tenido yo durante años y nunca he tenido ningún problema al respecto.
5. Copias
Otra recomendación de Google es que deshabilites la función de crear una copia de los mensajes enviados en la carpeta Enviados. Encontrarás esta opción en la configuración de la cuenta > Copias y carpetas.
Esto al menos te ahorrará el estúpido proceso de subir dos veces el mismo mensaje: uno para enviarlo y otro para crear la copia. Especialmente relevante si tu conexión es muy lenta o estás adjuntando un archivo de gran tamaño.
6. Notificaciones
Ya para terminar, seguramente la principal diferencia entre usar un cliente de correo o la versión web de Gmail sea la notificación inmediata cuando recibes un nuevo mensaje.
Desde la configuración de la cuenta puedes ajustar cada cuántos minutos buscará nuevo correo, en Configuración del servidor > Comprobar si hay mensajes nuevos cada XX minutos.
Además, al usar Gmail en un cliente como Thunderbird, suele ser bastante perezoso buscando nuevos correos en carpetas más allá de la bandeja de entrada. Una forma de asegurarte de que eso no sucede es hacer clic derecho en las carpetas que te importan, y elegir Propiedades. Después, marca Al obtener mensajes nuevos de esta cuenta, comprobar siempre esta carpeta.