En el día a día usamos multitud de expresiones y conceptos que resultan obvios y básicos para aquellos acostumbrados a la tecnología, pero que suenan a chino a quienes acaban de empezar (y no son chinos).
¿Tu padre, abuelos, o cualquier persona sin mucha idea, ha decidido incorporarse a esto de la informática y «el interné»? ¿Claman por «tuitear» y hacerse fan de Joselito en el «feisbuk«?
Entonces lo más seguro es que las hayas pasado canutas para explicar unos cuantos conceptos. A continuación te exponemos los diez que más te costará explicar, si bien hay muchos más.
1. La existencia de la barra de direcciones
Situada en la parte superior de todos los navegadores, la barra de direcciones es el lugar donde se escribe la página que se quiere visitar.
No obstante, por algún motivo desconocido, parece ser invisible para algunos ojos, que se empeñan en poner la dirección en el buscador de Google. Así, se hacen búsquedas en Google tan absurdas como «geekazos.com», en lugar de escribir la dirección directamente arriba.
Posible solución:
Además de una graduación de la vista, si el problema persiste puedes probar a cambiar la página de inicio del navegador por una que no incorpore cuadro de búsqueda alguno. Así, no tendrán más remedio que escribir la dirección en su lugar.
2. Cuándo hacer clic o doble clic
Una cosa que suele sacar de quicio tanto al que aprende como al que está enseñando es la diferencia entre cuándo se hace clic o doble clic.
De este modo, resulta desternillante ver a alguien haciendo doble clic en enlaces de Internet, o un único clic en iconos del Escritorio, para después esper a que cargue algo con toda la paciencia del mundo.
Para aquellos de nosotros en quienes el código binario corre por nuestras venas, es bastante evidente cuándo usar uno y cuándo otro, pero hay que reconocer que las reglas no son del todo lógicas para quien empieza.
Posible solución:
En estos casos, lo mejor es establecer una serie de pautas. La primera y más importante: el cursor. Si éste cambia a una mano, entonces estaremos hablando inequívocamente de un único clic.
Además, otra regla de oro es que, tratando con archivos, un único clic seleccionará, y doble clic lo abrirá. No obstante, esta norma no se aplica, por ejemplo, al Menú Inicio donde, al igual que en todos los menús desplegables, se utiliza un único clic.
Para cualquier otro supuesto: un clic simple.
3. La rapidez de los atajos de teclado
Otro caso bastante típico es el odio irracional a los atajos de teclado. De este modo, no importa si realizará la misma acción una o un millón de veces: para hacerla seguirá todos los pasos utilizando el ratón, aunque lleve media vida.
De este modo, en lugar de hacer un simple y rápido Control + C / Control + V, usará los menús Copiar y Pegar de la aplicación.
- Copiar y pegar desde la Barra de herramientas, una de las mejores formas de perder el tiempo
Posible solución:
Los atajos de teclado son adictivos: deja que los prueben por sí mismos y, tras usarlos y ver lo rápidos que son, seguramente no puedan dejar de usarlos.
Eso sí, poco a poco…
4. Qué es un error 500
Como seguramente sabrás, los servidores devuelven una serie de códigos que determinan cómo fue la cosa: 200 significa que todo fue bien, 404 que la página no se ha encontrado y 500, Internal Server Error.
El problema aquí es que para explicar por qué determinada página dice cosas tan extrañas deberías meterte en extensos jardines, explicando conceptos más amplios (servidores, errores…) de los que normalmente querrías contar (y tu interlocutor querría escuchar).
Posible solución:
En esta ocasión la solución es sencilla. Si alguien quiere saber qué es un error 500, o 404, o cualquier otro, la respuesta ha de ser la misma: es un problema de ellos.
5. Discos duros, particiones, carpetas
En el pasado, esto era muy fácil: un disco duro, con directorios y archivos en su interior, pero tras la llegada de Windows XP la cosas se empezó a complicar.
En la actualidad, Vista y Windows 7 han acabado de liarla con la incorporación de accesos directos, carpetas virtuales y librerías, que contrastan con el concepto lineal y jerárquico del pasado.
Posible solución:
Si no puedes con ellos, únete. Intenta simplificar la situación: el equipo tiene disco duro, que en su interior tiene carpetas y archivos. Eso es todo lo que necesitan saber.
Y será mejor que no intentes explicar dónde está la carpeta Mis Documentos. Mejor que digas que «simplemente está», en lugar de hablar de Documents and Settings (en Windows XP) o Users (en Vista/7)
6. Qué es Twitter
¿Así que hay un pájaro azul que hace tweet tweet, y unas personas siguen a otras, y esas a veces siguen a las primeras, se comunican mediante mensajes cortos que incluyen enlaces indescifrables, se nombran anteponiendo arrobas a su nombre y ponen extraños códigos después de almohadillas #?
Dicho así no parece otra cosa que el delirio de un demente, y es que el principal problema aquí no es que tu padre no sepa qué es Twitter, sino que seguramente no lo sabes ni tú. Ni sus creadores. Ni siquiera el mismísimo pájaro azul.
Posible solución:
Maniobra de distracción, cortina de humo. Finge que alguien te llama por teléfono y huye de la escena del crimen. Corre, corre por tu vida. Es una batalla que no puedes ganar.
7. El ordenador no es un libro de texto
¿Te ha pasado alguna vez que alguien lee el contenido de la pantalla como si fuera un libro: de izquierda a derecha; de arriba a abajo?
El cerebro del navegador asiduo está preparado para discernir entre lo que es interesante y lo que no, pero para el no iniciado todo parece igual de importante.
Ejemplo del reparto del contenido útil en una ventana
Posible solucion:
El entrenamiento será la mejor terapia, pero extensiones como Readability, que elimina todo aquello que no sea lo principal de la página, para una lectura más cómoda, serán de gran ayuda.
8. Qué es un puerto
Cuando algunas personas se enteran de que sus ordenadores tienen puertos, se extrañan de que en tan pequeña superficie puedan atracar los barcos.
Este concepto de redes medianamente avanzado trae de cabeza a muchas personas, noveles y no tanto pues, especialmente hace unos años, era casi imprescindible tener algo de pericia con el tema para cualquier cosa (descargas, videoconferencia, juegos en red, IRC…)
Posible solución:
Hace un tiempo ya te explicamos en este post qué son los puertos, así como cómo abrirlos, en la segunda entrega. A leer toca.
9. No ayudes al nigeriano
Si la viuda de un ex-presidente de algún país africano requiere de tu ayuda para conseguir sus fondos desde una cuenta bancaria en Suiza, lo menos que puedes hacer es sospechar.
Cuando uno acaba de empezar con esto de Internet, no se suelen recibir muchos correos, lo cual hace que cada uno de ellos se lea con esmero. ¿Por qué le mentiría alguien con algo así?
Posible solución:
Como norma general se ha de desconfiar de cualquier cosa que salga de lo habitual, pero si encima proviene de alguien que no conoces y es prácticamente inverosimil, lo mejor que puedes hacer es borrar el e-mail según llega.
10. Escribir en MAYÚSCULAS no mola
No importa lo elegante que sea escribir en papel con mayúsculas, y que en todos los formularios estándar te obliguen a hacerlo, cuando la cosa se vuelve digital, las mayúsculas se deben evitar salvo cuando sea estrictamente necesario.
Las mayúsculas son el menor de los males de este comentario
Posible solución:
A falta de un sistema que aplique descargas eléctricas al presionar la tecla de Bloqueo Mayúsculas (también conocida como Caps Lock) deberás conformarte con otras opciones.
Hace unos días hablábamos de KillKeys, una utilidad para deshabilitar cualquier tecla de tu teclado. Si eso no funciona, siempre te quedará arrancar físicamente la tecla.